7.9.07

Tengo días triste, desde que me enteré que la enfermedad de José Cruz se había hecho pública. Apenas hacía unos meses que escuchamos a Real de Catorce en vivo la última vez, privilegiadamente, en el zócalo de mi ciudad. Ahora me consterna lo que leo en www.realdecatorce.com.mx, se trata de un comunicado extenso sobre una situación delicada: José Cruz se ha deslindado por completo de su banda, los que lo acompañaron en el camino de hacer el blues mexicano. Intento comprender... me gana la tristeza, me ganan las ganas de consumirme fumando la venenosa, de morirme fumando yerba-buena. Un ciclo importante dentro de la cultura musical mexicana se ha cerrado para siempre, desaparece el mejor grupo que ha parido nuestro país, se nos muere el poeta. No podía ser de otra manera, doloroso azul que llueve el blues...

José, no me dejes por favor (me sentencias a vivir).

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mal pedo por José y lo que pasa con Real de Catorce. He visto otros casos de enfermedades terminales y la gente en verdad se pone mal, es como una especie de venganza en la que parece ser la frase: "Si yo me chingo, se chingan todos", la que impera en la cabeza del futuro finado.

Ni hablar, a seguir caminando como un principe vago.

Un saludo.

Héctor.